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domingo, 20 de abril de 2014

Accidente en el género Sarcoscypha.

A raiz de presentar el artículo de montajes en Sarcoscypha jurana, surgió la idea de publicar un artículo para neófitos en el tema, como es mi caso en particular y que sirviera para situarnos a la hora de identificar a nivel macroscópico, según distribución, las diferentes Sarcoscyphas que componen este género en la Península Ibérica y las Islas.
Lo cierto es que el rojo es mi color favorito y el tono que presentan las Sarcoscyphas me atrae de manera sobrenatural.

Así que el primer paso es motivar a mi amigo Alberto Lorenzo aficionado a la micología, para involucrarlo en esta idea. Creo que me pasé motivando...pues no solo le gustó la idea, sino que me propuso incluir la microscopía y claves que separan a estas preciosas especies. Tiró de contactos amigos y reunimos todo el material fotográfico para ejecutar el trabajo.

Una primera inquietud, era poder mostrar a las Sarcoscyphas en su propio habitat, ya sabéis, no un belén montado para la ocasión, sino una visión de cómo y dónde crecen insitu.
Habitat de Sarcoscypha jurana.


















Vista bajo la cobertura arbórea autóctona.



Fue entonces cuando casualmente tropiezo con algo que me pareció diferente al entorno y lo visto hasta ese momento, una sarcoscypha mucho más clara que el resto, de hecho naranja. Pregunto, Alberto, ¿es normal que pierdan color estas setas...? Alberto me mira perplejo y dice, ¿a que te refieres...? Entonces le muestro el ejemplar y por su mirada, percibo que algo raro pasa. Sus ojos se encienden como los de un lobo ante el ataque a la presa y dice, "pero bueno quetenemos aquí"...Me indica que fotografíe en modo macro la seta y que la compare con las sarcoscyphas rojas que hay de manera abundante a su alrededor. Dicho y hecho, me dispongo a fotografiar los ejemplares cuando oigo de nuevo..."anda, anda, anda, mira lo que acabo de encontrar..." ¿qué había hallado?. Al final del artículo lo mostramos.

El género Sarcoscypha se encuentra taxonómicamente dentro del reino Fungi en el orden:
Orden Pezizales.
Familia Sarcoscyphaceae.
Género Sarcoscypha.

En la Península Ibérica contamos con la siguientes especies:
S. austriaca (O. Bek ex Sacc.) Boud.
S. coccinea. (Jacq.) Boud.
S. jurana. ( Boud.) Baral.
Y en las Islas canarias la especie:
S. macaronesica.( Baral & Korf.)

Tabla comparativa de diferencias entre especies.











Especies de la Península Ibérica.
Sarcoscypha austriaca (O. Bek ex Sacc.) Boud.




Fotos macro y micro de Nino Santamaría.



















Detalles microscópicos de estructuras con valor taxonómico.




Sarcoscypha coccinea. (Jacq.) Boud.




Foto macro de Javier Moreno. 
Fotos micro de Alberto Lorenzo.


Detalles microscópicos de estructuras con valor taxonómico.























Sarcoscypha jurana. (Boud.) Baral.



Foto macro: Agustín Ruiz
Fotos micro: Alberto Lorenzo.


















Detalles microscópicos de estructuras con valor taxonómico.





Especie de las Islas Canarias.
Sarcoscypha macaronesica. ( Baral & Korf.)



Fotos macro y micro de Miguel Angel Ribes.


Detalles microscópicos de estructuras con valor taxonómico.




Con esta presentación ya nos podemos hacer una ligera idea de la distribución geográfica que presentan las cuatro diferentes especies en la Península Ibérica e Islas. Está claro que la separación macroscópica es literalmente imposible y que solamente los valores microscópicos sirven para ratificar de qué especie en concreto se trata al encontrar cualquiera de las Sarcoscyphas.
Gracias al interés exhaustivo que muestra el grupo de aficionados a la micología en nuestro pais, junto con los expertos, el numero de citas aumenta por momentos. Por ejemplo en Huesca ya hay actualmente unas cinco diferentes citas de S. jurana y tenemos conocimiento de una nueva de S. austriaca que está por publicarse.
No obstante las nuevas citas tienen el carácter de excepcional o aislado, por que lo normal es su aparición dentro de los mapas de distribución.

Al comienzo del artículo os llamaba la atención sobre un accidente...¿de qué se trata?

De algo no que no había ocurrido en la Península Ibérica, en concreto en la especie Sarcoscypha jurana. El 28/2/2014 los carotenoides que proporcionan el típico color rojo a las Sarcoscyphas, han sufrido variaciones en un ejemplar, como podéis ver a continuación.


Sarcoscypha jurana naranja. (Boud.) Baral.



Este fenómeno si había ocurrido de manera aislada en Europa. Han desaparecido los carotenoides rojos, apareciendo los de pigmentación naranja. Lo importante es saber si también se producen variaciones en su estructura interna que pudieran tener valor taxonómico. La microscopía muestra fidelidad total a las extructuras con valor taxonómico. 

Detalles microscópicos de estructuras con valor taxonómico.

Barajados estos datos hay que llegar a la conclusión de que un ejemplar ha sufrido un accidente. Una ligera variación tan solo de color, la forma del ejemplar permanece inalterable.
Pero lo más sorprendente ocurrió a continuación, al encontrar Alberto una ramita en descomposición de Tilia platyphyllos, con dos ejemplares de Sarcoscypha jurana de color blanco, a solo un metro de distancia del ejemplar naranja. Esto si era más extraño que el anterior hallazgo.
Lo primero era  realizar nuevamente la microscopía correspondiente, para analizar los valores que arrojaba.
A continuación los podéis disfrutar.


Sarcoscypha jurana blanca. (Boud.) Baral.


Foto macro de Agustín Ruiz.
Fotos micro de Alberto Lorenzo.



Detalles microscópicos de estructuras con valor taxonómico.

En este caso tampoco surgen variaciones en las estructuras con valor taxonómico a pesar de tener los ejemplares un aspecto tan diferente. Los carotenoides simplemente han desaparecido. 
Como datos curiosos os podemos adjuntar que se ha hecho un seguimiento en particular del punto en cuestión donde se ha producido el albinismo. Diecisiete días después el 17/3/2014, de nuevo aparece otro caso de albinismo exactamente en el mismo punto, en esta ocasión solamente un ejemplar. Se observan en los tres ejemplares albinos una clara disminución en el tamaño. Como experimento este último ejemplar se ha mantenido en frigo a 5ºC, provocando choques térmicos para ver si evolucionaba al contraste, pero no solo no ha variado sino que permanece en estado inalterable.

¿A qué conclusión podemos llegar?
Pues a que no se trata ni de una nueva forma, ni de una nueva variedad ni cosa semejante. Si no hay modificaciones estructurales con valor taxonómico hay que pensar que tan solo se ha producido un accidente o varios, cosas caprichosas de la naturaleza.
Eso si, bendito accidente el que nos permite disfrutar de una imagen como la siguiente...¿se repetirá?...solo el inexorable paso del tiempo proporcionará la respuesta.


Agradecimientos:
Quiero agradecer a todos los que han colaborado para hacer posible la realización de este artículo.

Nino Santamaría. (S. austriaca)
Miguel Angel Ribes. (S. macaronesica)
Agustín Ruiz. (Fotografía)
Alberto Lorenzo. (S. coccinea, S. jurana, naranja y blanca)



2 comentarios:

  1. Gracias!! Realmente es suerte coincidir espacial y temporalmente con un capricho de la naturaleza, el resto del trabajo es gracias a estos grandes micólogos que han colaborado.
    Saludos de Alberto y Javier.

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